Esta mañana una sesión de fotos me ha entretenido hasta más de las dos de la tarde y antes de ir a recoger a mis hijos al colegio tengo una entrevista para ultimar los detalles de un proyecto que tengo entre manos. Dispongo solamente de una hora para pasar por casa pero hago el esfuerzo porque sé que Ana tenía un rato y le apetecía que comiéramos juntos.
He llegado antes que ella y no hay nada preparado de víspera ni sobras del fin de semana -de ésas que Marta Olass tan bien aprovecha-. Quiero sorprenderla y que cuando llegue esté todo listo pues su tarde va a ser más larga que la mía y su trabajo para una conocida revista la retendrá hasta bien entrada la noche.
El hecho de sentarnos un rato juntos y comer un plato de pasta semi-casera nos ha puesto las pilas y afrontamos nuestros quehaceres de otra manera. Bueno, Ana antes se beneficia de media hora en el sofá y se duerme con una sonrisa beata cuando cierro la puerta.
No podía dejar de enviaros mi plato y la buena sensación que produce parar un rato con tu chica en la mitad del día en el bullicioso, loco y ajetreado Madrid. Vuestras conservas nos salvan de mil y un apuros de manera saludable, cosa que nos parece fundamental. Gracias, Olasagasti!
ORECCHIETTE AL PESTO para 2
Medio paquete de 500 g de Orecchiette.
1 tomate
Parmesano
Sal y aceite de oliva virgen extra.
Antes he puesto dos cucharadas soperas de pesto en el plato (he leído en el bote que mejor poner un poco de agua de cocer la pasta) y he cortado un tomate en trozos pequeños. Lo he removido añadiendo un chorro de aceite de oliva. He incorporado la pasta.Y he hecho la foto para enviártela y colgarla en mi Instagram. Antes de comérnosla me he acordado de añadir el parmesano.
Lavarme los dientes, beso a Ana. Otro beso -está casi roncando-. Y largarme a mi entrevista con la bolsa de bocadillos y fruta para los enanos.
Daniel
No Comments