Menú facilón, brunch, desayuno de campeón o comida rápida, llámalo como quieras. Estas tres tostadas con tres latas te sacarán de más de un apuro con nota sobresaliente.
Por sencillas y por riquísimas. Y por poder elegir entre fría, templada y caliente. Y porque no hay que saber cocinar.
Si te gusta el pan bien acompañado, apúntate las tres tostadas con tres latas de hoy:
1. Tostada de centeno con hummus y atún del Cantábrico. Fría.
Puedes prepararte o, más fácil aún, comprar hummus de garbanzos o berenjenas y untar generosamente la tostada para terminar con los trozos de atún del Cantábrico y unas semillas de sésamo.
¿Cuántas te comerías?
2. Tostada de pan de espelta, coliflor y bonito del norte. Templada.
Pan tostado, lo quiero crujiente. Esparzo aguacate machacado. Unos arbolitos de coliflor hervida al dente, justo unos minutos. Y al final, el bonito del norte en aceite de oliva.
Una lluvia de escamas de sal y pimienta negra si te apetece.
¡Y qué mezcla, señoras y señores!
3. Tostada de tomatitos Cherry al horno y atún claro. Caliente.
Tuesto una rebanada de pan de esta hogaza hermosa de trigo blanco. Que pueda colocar cómodamente los tomatitos recién salidos del horno. Los he metido en la fuente con cebolla durante 40 min a 180 grados. Te invito a probar con finas hierbas y ajo otro día.
Y, bueno, lo mismo que antes: plato, pan, la verdura y el pesado azul. Pin, pan, chispún, en un periquete listo este atún.
Cierra los ojos y mmmmmm.
Tres tostadas salvavidas. Por sencillas y por riquísimas. Elige entre fría, templada y caliente. Para comer rico y bien ¡no hay que saber cocinar! Un poco de salseo, curiosidad y buen gusto.
¿Con cuál empezamos esta noche? ¿Fría, templada o caliente? Tres tostadas con tres latas que no te dejarán indiferente.
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